Como
complemento del sistema de transporte masivo del metro, y buscando reanimar
social y económicamente uno de los sectores más deprimidos de la ciudad de
Medellín, nace el metro cable.
Este sistema
de transporte, localizado en la zona nororiental de la ciudad, mantiene los
estándares de calidad del Metro de Medellín a lo largo de un corredor aéreo que
amplía el área de influencia del Sistema, garantizando la integración y rapidez
al utilizar los diversos modos de transporte, además de la utilización de
energía limpia no contaminante. Pero no solamente lo tomemos como
una solución de transporte para la comunidad de escasos recursos, que ahora se
desplaza hacia otras zonas de la ciudad de una manera más rápida y eficaz,
también se ha convertido en una importante vitrina para el turismo, que ha
jalonando el progreso a la zona.
Este
proyecto llegó como el gran sueño a las laderas de estos barrios, en
principio se convirtió en una fuente de empleo en su construcción, de cierto
modo eleva su autoestima tanto individual como colectivamente, y claro la
calidad de vida mejora considerablemente.
Metrocable
es un gran empujón a la política de integración del transporte. Diariamente le
puede aportar 25.000 pasajeros al Metro, con grandes economías para los
usuarios y con excelentes beneficios para el medio ambiente.
El sistema
metro cable del metro de Medellín consta con dos líneas, la línea K y la línea J, que se
complementan y se enlazan con las férreas A y B Es así que el metro cable sirve
también como fuente alimentadora del Metro
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